Publicación 04-10-2023
En la adolescencia, salen a la luz muchas nuevas ideas y sentimientos sobre las capacidades propias, que antes no estaban o se les daba menos importancia. Cuando este adolescente tiene hipoacusia, todas estas emociones y sentimientos conviven con una condición más – la sordera – que puede influir en la imagen de uno mismo en esta etapa.
Cuidar la autoestima de nuestro hijo con pérdida auditiva.
La aceptación de la sordera es un proceso que comienza cuando los niños son pequeños, pero regresa de nuevo en la adolescencia. En este momento, se empiezan a hacer preguntas sobre su identidad, y se plantean cosas como, a qué grupo pertenecen. También les empieza a preocupar lo que piensan los demás sobre ellos, lo que puede conllevar a crear sentimientos de rechazo. Nuestros adolescentes pueden llegar a sufrir de la misma manera, haciendo que su autoestima y su percepción de sí mismos sufran las consecuencias.
En la adolescencia, algunos hábitos comunes que encontraremos en nuestros hijos con pérdida auditiva son:
- Cambiar las pilas de los audífonos disimuladamente
- Taparse el audífono con el pelo
- Quitarse la prótesis antes de entrar en el instituto.
Es muy importante, que, como padres, aprovechemos aquellos momentos de tranquilidad para hablar con nuestros adolescentes para hablar con ellos sobre los beneficios de llevar audífonos. Les ayudará el reafirmarles que sus audífonos les aporta más personalidad. En lugar de ver su pérdida auditiva como una discapacidad, les ayudaría verla como un superpoder, y para ello les podemos ayudar explicándoles, que su super poder se trata de acceder a los sonidos con más facilidad que las personas normoyentes.
Ante todo, es muy importante que como padres, estemos a su lado, como siempre, e intentemos comprender esta nueva situación, pues la sordera en la adolescencia supone muchos cambios y adaptaciones.
Acompañamiento, sensibilización y educación
Recibir la noticia de que nuestro hijo tiene una limitación auditiva es motivo razonable de preocupación e inquietud. Ante una situación semejante, una de las actitudes más comunes por parte de los padres es la incredulidad. Incluso después de ser diagnosticado, muchos progenitores se resisten a creer que su hijo tenga un problema de audición grave.
Ese comportamiento es comprensible, pero es necesario superarlo lo antes posible para evitar que la limitación sensorial que sufre el adolescente acabe afectando de manera dramática a su capacidad de aprendizaje y socialización. Nuestra ayuda como padres, familiares o, incluso, como profesores o tutores, debe realizarse en forma de acompañamiento, sensibilización y educación.
- Educación
- Sensibilización
- Acompañamiento
Educación
Educar frente a la pérdida de audición
Debemos explicarles con detenimiento qué implica la discapacidad auditiva en la adolescencia y en la etapa adulta, en qué le puede o no afectar. No deberemos ocultarle nada, pero deberemos tener tacto y empatía a la hora de explicarles la situación.
En GAES Junior os podemos ayudar a valorar su grado de pérdida auditiva y resolveros todas vuestras inquietudes con la cercanía y empatía. Además de darle soporte específico auditivo, consejos para cuidar su salud auditiva y proveerle de todas las herramientas necesarias para que los efectos de su sordera remitan gracias a audioprótesis que les faciliten la transición de esa aceptación.
Sensibilización
Sensibilización de sus capacidades
Es importante hablarles de autonomía, de las capacidades que siguen teniendo y que les permiten de poder valorar y decidir como afrontar cualquier dificultad. Pese a las dificultades que pueden hallar deben sentir que no carecen de las mismas facultades para poder alcanzar sus sueños.
Además, apoyarse en los profesionales del instituto y en el profesorado, y explicarles en detalle la situación del joven, es beneficioso para que ayuden a valorar las capacidades del adolescente. Asi mismo indicarle a vuestro hijo que puede acudir a ellos con dudas o consultas específicas sobre su situación, aumentando así el grupo de confianza en el cual pueda resolver sus inquietudes.
Acompañamiento
Acompañarlos durante la inseguridad
Tener presente que es suficiente acompañarlos cuando se sientan inseguros e intentar normalizar la situación, no es recomendable hacerles sentir de forma “especial” porque ello pueden interpretarlo como “raro” o “fuera de la normalidad”. No quieren destacar por sus carencias, sino por sus ventajas, así que será momento de reforzar éstas para evitar que se centren demasiado en la nueva situación.
És importante Informar al resto de la familia y animarlo a que el mismo pueda compartir sus preocupaciones con amigos de confianza. Que, entre todos, nuestros adolescentes se sigan sintiendo integrados y acobijados por la comprensión y el afecto que les une, que no perciban que los demás los ven con lástima o que les tratan con extra delicadeza porque eso les hará sentirse diferentes sin desearlo.
Fuentes:
https://saposyprincesas.elmundo.es/consejos/psicologia-infantil/como-funcionan-las-emociones-de-los-ninos/
https://www.revistagacetaudio.es/el-experto/acoso-escolar-y-discapacidad-un-binomio-preocupante/
https://www.mihijosordo.org/ayudarle-aceptarse.php