¿Cómo ayudar a los hijos a afrontar el inicio de clases?
Categorías:
Publicación 04-04-2019
El primer día de cole de su vida
El comienzo de las clases es un hecho ya. Seguro que muchos de vosotros estaréis ansiosos por la vuelta al cole de vuestros peques, pero más nerviosos estarán aquellos padres que afrontan el cole por primera vez con su hijo.
¿Qué podemos hacer para que nuestro pequeño sufra lo menos posible al iniciar sus clases por primera vez? ¿Qué debo decirle? ¿Cómo debo comportarme para que no sea un suplicio para mi hijo?
No os preocupéis tanto, pues el niño terminará asimilando ese cambio. Sin embargo no está nunca de más seguir algunos consejos para ayudar a que el pequeño no «sufra» demasiado esa rutina:
- Siempre deberéis mostrar confianza en la Escuela. Así vuestro peque percibirá esa tranquilidad y confianza, y se sentirá seguro. Intentad acompañarle en los primeros días, tomaros vuestro tiempo para «despegaros» de vuestro hijo con calma.
- Asimismo, es importante explicarle a la profesora cómo soléis manejar a vuestro pequeño, sobre todo en el caso de los más pequeños, en los momentos de juego, alimentación y sueño.
- Cuando os despidáis del niño, no os vayáis cuando veáis que está distraído pues esto le podría crear más inseguridad. No alarguéis demasiado las despedidas: siempre dejarle en el cole con una sonrisa, un beso y diciéndole quién y cuándo irá a buscarle. Esto le dará tranquilidad.
- Después del cole, deberéis dedicarles tiempo realizando actividades que le resulten agradables y divertidas, como por ejemplo: ir al parque, bañarle, escucharle, dibujar con ellos, pasear. Actuad con normalidad.
- Siempre tendréis que hacer comentarios positivos relacionados con la escuela: los juguetes, los otros niños, las actividades que van a realizar, lo guay de tener una profe, lo que aprenden, etc. Además de esto, es importante explicarle la nueva situación de forma clara y calmada. Evitar siempre comentarios del estilo: «pobre mi niño, que tiene que ir al cole»… y similares.
- Durante esta etapa no es un buen momento para hacer otro tipo de cambios en su vida como, por ejemplo, quitar el chupete, el pañal, cambiar de cama, etc. Siempre es mejor esperar a que vuestro hijo se haya adaptado a la escuela para realizar cualquier otro cambio importante para su desarrollo.
Después de haber pasado lo peor, querréis comprobar que vuestro hijo se ha adaptado bien al colegio, pues ¿Cómo sabemos que el niño es feliz y acepta la escuela? En general, la mayor parte de los niños son felices allí donde los cuidan.
Estos signos nos darán una idea:
- El niño acepta a su profesora y a sus compañeros de clase con cariño.
- Acepta con alegría comer y dormir en el colegio.
- Juega y utiliza los juguetes y materiales de la escuela con confianza y autonomía.
- A veces, algunos niños siguen llorando al entrar a la escuela aunque el resto del día se encuentren a gusto y contentos allí. Esto se debe a que para algunos la separación del padre o madre le sigue resultando difícil. Con el tiempo esto remitirá por completo y podréis estar más tranquilos.
Pero, ¿Qué pasa con los padres que ya han llevado a su hijo al colegio? ¿Cómo podéis ayudar a vuestro hijo a sentirse cómodo volviendo a la escuela?
¡De Vuelta al Cole! Pero con alegría
Muchos de vuestros peques – y no tan peques – , no querrán volver al colegio y es normal, pues en las vacaciones se lo pasan fenomenal, pero hay que dejarles claro siempre que, ir al colegio, es su responsabilidad.
¿Qué debemos afrontar para que sea más llevadera la vuelta al cole de vuestro pequeño? Estos consejos os ayudarán con la situación:
- Es importante abordar el inicio escolar como lo más normal del mundo (al fin y al cabo lo es), como papá y mamá han vuelto al trabajo, sin problemas.
- No se debe utilizar la escuela en tono amenazante: «ya verás cuando vayas a la escuela» Cuando decimos esto, además de hacer un flaco favor a vuestro hijo, en el fondo estáis diciendo ya «verás cómo allí pondrán el orden que yo no sé poner». Y es un refuerzo negativo que no conviene que interioricen.
- Siempre hablar del regreso escolar en positivo, como algo que, aunque a lo mejor no nos guste, hay que hacer, que tiene muchas cosas buenas (omitiendo las negativas) pero que es necesario hacer por el bien propio del niño.
- Hacedle partícipe en la preparación de la mochila, de los libros, mencionadle la vuelta con sus compañeros de clase, las actividades que le gustan, las actividades extraescolares, etc.
- En caso de que se ponga testarudo, no le abráis la duda o la posibilidad de que puede escoger entre ir o no ir. Sin dramatizar, sin sentir pena alguna, plantadle con claridad que aquí no hay duda, hay que ir al colegio y no hay otra opción.
- No hay que reírse ni burlarse de sus temores nunca, por muy infantiles o inocentes que sean. Hay que darle siempre seguridad y confianza, pero siempre hay que ser realistas. Por ejemplo: «No será fácil hijo, pero verás que tú lo logras. ¡Eres ya muy grande!».
- Es recomendable que, un par de semanas antes de la fecha señalada, se empiece a ordenar la vida del niño y de la familia en general. Crear rutinas, crear constancia en los deberes de casa. Se deberá regularizar la hora de comer, de cenar, de ir a dormir y de levantarse por las mañanas. Así, al peque, le resultará menos ‘traumática’ la rutina escolar.
- Además de esto, siempre vendrá bien buscar actividades que se aproximen a la escolaridad. Esto debe de ir acompañado de una reducción del ritmo de libertad desordenada que tienen las vacaciones. El niño debe acudir a clase en plena forma, es decir entrenado, motivado y descansado, así podrá rendir y no le costará mucho adaptarse de nuevo.
La vuelta al cole es lo más normal del mundo y así debe ser enfocado siempre con cualquier cosa que se haga. Dar ejemplos de cómo su padre y su madre van al trabajo y gracias a eso pueden comprar cositas, lo mismo ocurre con ir al colegio: tiene recompensa.
Todos estos consejos y tips, probablemente tendrán que ser adaptados a cada niño, porque cada hijo es un mundo, pero seguramente puedan ayudaros mucho a afrontar el inicio escolar con vuestros hijos lo antes posible y de la mejor forma existente. ¡Feliz comienzo escolar! Mucha energía y mucho ánimo.